Mostrando las entradas con la etiqueta Siglo XX. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Siglo XX. Mostrar todas las entradas

domingo, 14 de julio de 2019

¡Vivir!

“—El buey ara el campo, el perro vigila la casa, el monje mendiga, el gallo anuncia la mañana, y la mujer teje, ¿dónde se ha visto un buey que no are? Así ha sido desde la antigüedad. ¡Vamos! ¡Muévete!
(…) al oír las voces del anciano, el viejo buey cansado levantó la cabeza y avanzó tirando del arado. Vi que la espalda del anciano y el lomo del buey eran igual de oscuros; dos existencias que entraban en el crepúsculo, surcando el duro suelo de ese campo, alzando terrones como olas en la superficie del agua.”
*************************
Yu Hua, narra en ¡Vivir! (publicada en 2010) la historia de Fugui, un heredero que dilapida su fortuna en los burdeles y en las mesas de juego. Cuando la tierra que pertenecía a su familia pasa a manos de un tahúr, todos deben irse a vivir a una choza. Allí lo acompañan sus padres y después de un tiempo Jiazhen, su esposa, quien había sido reclamada por su padre en vista de los reveses económicos.
La historia empieza cuando un hombre que recorre los campos chinos en busca de canciones populares se encuentra con un anciano que trabaja en los arrozales con un buey tan viejo y tan solo como él. El anciano le cuenta toda su vida. Con un sentido fatalista cuenta lo que le ocurrió desde que era joven hasta el presente: cómo fue testigo del derrumbe del sistema feudal que imperaba en China, aún en los comienzos del siglo XX; la instauración del comunismo y las consecuencias económicas para su pueblo y la ciudad cercana que en última instancia son el reflejo de lo que sucedió en todas partes. La “Gran marcha” o la “Revolución cultural” definen un nuevo país mientras la realidad de Fugui transcurre entre las exigencias productivas marcadas por el Estado y las muertes que diezman a su familia.
A China se le conoce en occidente por acontecimientos que evidentemente tienen la dimensión de catástrofes o hitos históricos según se mire; pero pocas veces se tiene la oportunidad de leer un relato donde se muestre el rostro sencillo de un país al que casi siempre se menciona en esta época por su milagro económico o sus intervenciones en política internacional.

sábado, 6 de julio de 2019

Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado

"Oh, poetas negros conocidos y desconocidos, ¿con qué frecuencia nos han sostenido vuestros sufrimientos vendidos en pública subasta? ¿Quién calculará las noches en que vuestras canciones nos hicieron sentir menos solos o vuestros cuentos hicieron parecer menos trágicas las ollas vacías?
Si fuéramos un pueblo muy dado a revelar secretos, podríamos alzar monumentos y celebrar sacrificios a la memoria de nuestros poetas, pero la esclavitud nos curó de esa debilidad. Sin embargo, baste con decir que sobrevivimos en relación exacta con la dedicación de nuestros poetas (incluidos predicadores, músicos y cantantes de blues)."
*************************
En el primer volumen de su autobiografía, “Yo sé porque canta el pájaro enjaulado”, que se publica en 1969, Maya Angelou relata la infancia y adolescencia de una chica negra en los Estados Unidos durante los años treinta y cuarenta.
Junto con su hermano Bailey, Marguerite Johnson pasa la infancia al lado de su abuela en un pueblo de Arkansas, donde la segregación se ejerce de manera implacable. Pero ellos no tienen que lidiar solamente con la dominación explícita o soterrada por parte de los blancos, deben luchar también, y quizás con mayor empeño, con la ortodoxia religiosa y la sumisión donde la comunidad a la que pertenecen encuentra refugio y respaldo.
En semejante entorno Marguerite y Bailey descubren el espíritu liberador de la lectura y la educación que se fortalece después en el ambiente despreocupado que respiran cuando se van a vivir con sus padres en S.t Louis y San Francisco; aunque allí deberán también pasar por dificultades que, al fin y al cabo, contribuirán a la formación del carácter de una mujer que desde pequeña aprendió a mirar con ojo crítico la realidad y a ver en la formación intelectual un instrumento para liberarse de la opresión racial y social. De todas las adversidades por las que tiene que pasar, Marguerite sale endurecida para enfrentar un mundo que sólo tiene para ofrecerle humillación y servidumbre.
Entre la rigidez moral de la abuela y la despreocupación de sus padres se consolida la fuerte personalidad de esta autora conocida en todo el mundo por la trascendencia social de su escritura.

viernes, 28 de junio de 2019

Evocación de Matthias Stimmberg

La misantropía es un humanismo;
el humanismo es también una misantropía.”
*************************

Entre todas las obras que ocupan un lugar notable en la historia de la literatura por la habilidad y relieve de sus creadores hay que destacar aquellas que superan el ámbito de un cuento sin pasar de unas pocas cuartillas. Una de ellas es “Evocación de Matthias Stimmberg” de Alain-Paul Mallard, publicada en 1995, donde se revive el enigma que suscitan los escritores imaginarios; pues Stimmberg no existe.
Con cada uno de los cuadros de esta pequeña pieza literaria se va descubriendo el perfil de un hombre que disecciona su entorno y su propia historia sin hacerse ni hacerle concesiones a nadie. Con frialdad y precisión retrata su cotidianidad y sus recuerdos.
Si por sus obras se puede conocer el alma de un escritor, en este caso debemos ceñirnos a estos pocos escritos para saber quién es Stimmberg, aún a sabiendas de su naturaleza ficticia.
La pluma de Mallard erige con palabras la realidad de un autor, asentado en una geografía fácilmente identificable, que se relaciona con personas de carne y hueso con cuyas vidas se entrecruzan sus propias memorias; gracias a esta remembranza, un poeta llamado Matthias Stimmberg tiene un lugar de mérito en el universo literario.
De la reedición que se hizo en 2015 merece destacar la inserción de unas ilustraciones de la “Vida de los animales”, del escritor y zoólogo alemán Alfred Edmund Brehm, publicada entre 1864 y 1869, cuyos grabados decimonónicos contribuyen a sumir el libro en ese ambiente de ambigüedad que nos producen las narraciones autobiográficas de un poeta casi verídico.

viernes, 17 de mayo de 2019

Lucas y Claus

“Hay vidas que son más tristes que el más triste de todos los libros.”
*************************
Entre 1986 y 1991 la escritora húngara Agota Kristof publicó en francés su trilogía de novelas compuesta por El gran cuaderno, La prueba y La tercera mentira donde desarrolla la historia de Lucas y Claus, unos gemelos cuyas vidas están íntimamente ligadas con el destino de un país durante la Segunda Guerra Mundial y el mundo que vino después.
La primera novela, “El gran cuaderno”, comienza con la llegada de dos niños a la casa de su abuela, una mujer analfabeta que los recibe de mala manera. Para sobrevivir al maltrato verbal y al aislamiento en una casa en las afueras de una pequeña ciudad los gemelos se dedican a extraños ejercicios destinados a endurecer su carácter. Con un comportamiento amoral que no respeta las normas que se les quieren imponer definen un estilo de vida propio (consignado minuciosamente en los cuadernos que escriben) que altera las costumbres y convicciones de los que están a su alrededor.
En “La prueba” se da la separación entre Lucas y Claus cuando éste último logra escapar del país, dominado por una potencia extranjera. Lucas sigue con su vida, aunque sus actos están determinados por la soledad en la que lo ha dejado su hermano.
En “La tercera mentira”, donde vuelve a aparecer Lucas, se ponen en duda todos los hechos que creíamos verdaderos; hasta el final no sabremos si hay dos hermanos o si uno de ellos es una entelequia creada por una sola persona, así como podrían ser invenciones las vicisitudes por las que han pasado los protagonistas, los personajes que han conocido o los dramas que han vivido. Todo lo que se ha contado pudiera ser el producto de la imaginación de Lucas… o de Claus.
En un lenguaje escueto y directo Agota Kristof narra una historia sin apasionamiento como es la misma escritura de los protagonistas que se ciñen al uso de palabras que encierran las emociones y los hechos en conceptos objetivos.

viernes, 3 de mayo de 2019

Cuatro años a bordo de mí mismo

Mañana llegaremos. Mañana. Qué terrible palabra es ésta. El mañana es absurdo. Es la esperanza de vivir y la certeza de la muerte. No debiera existir el mañana. Siempre debiera ser hoy. El hoy es lo logrado, lo que se alcanzó, la realidad, lo concreto. Hoy, ¡todo debiera ser hoy! Con esa redondez de verdad que tiene el hoy. El hoy que es la negación de la muerte.”
*************************
En 1932 se publica la novela de Eduardo Zalamea Borda Cuatro años a bordo de mí mismo, cuyo tema gira en torno a la vida, la muerte y las pasiones que las alimentan. Una obra introspectiva donde el narrador recorre el lugar que podría llegar a ser el más apartado para cualquier ser humano: su propia alma.
El protagonista, un hombre del interior arriba a Barranquilla con la intención de embarcarse hacia la península de la Guajira, el lugar con el que ha soñado y donde no sabe si podrá realizar sus fantasías. Pero la realidad superará cualquier paisaje imaginario de los que se ha forjado; empezando por el mar siempre cambiante y misterioso que al principio le niega la entrada a ese lugar mítico hacia el que se dirige. Cuando al fin llega se da cuenta de que para ese mundo nada lo ha preparado. Los personajes con los que se encuentra, gentes de todas las procedencias, combinan sus costumbres con las de los indios en un ambiente que incluye casi siempre la violencia. Personajes que no pueden escapar a la hostilidad de la tierra y el mar, ni a esos indios que aparecen por lo general en un segundo plano, pero cuya presencia es permanente.
En las páginas de esta obra, primordial para entender la narrativa moderna latinoamericana, la poesía se manifiesta en cada párrafo; en ella Zalamea describe con habilidad gentes, paisajes, situaciones y unos sentimientos que están más cerca de lo primitivo que de las convicciones morales con las llegan todos a aquellas tierras, donde hombres y mujeres están dominados por el deseo que se manifiesta de múltiples maneras.

viernes, 26 de abril de 2019

Una letra femenina azul pálido

Ni la cultura personal, ni la educación, ni las buenas maneras, ni otros bienes suntuarios similares logran subvertir la índole brutal de las relaciones básicas que existen entre los seres humanos.”
*************************
En la novela corta Una letra femenina azul pálido, publicada por Franz Werfel en 1941, se disecciona de manera concisa la vida de Leónidas, un “parvenu” de la sociedad vienesa que, aunque han pasado décadas desde la caída del imperio austriaco, aún se rige por normas estrictas.
De extracción humilde, Leónidas debe su éxito a la feliz coincidencia de varias circunstancias que le abrieron las puertas de un ambiente que consideraba inaccesible. A los cincuenta años ha llegado al cenit de su vida y su carrera; casado con la bella Amelie Paradini, una mujer acaudalada, no depende de un magro salario para vivir. Lleva una existencia refinada donde no hay cabida para las preocupaciones.
Pero la imagen que se ha fabricado Leónidas en calidad de alto funcionario estatal está a punto de derrumbarse. En el preciso momento en que se ve a sí mismo como el paradigma del éxito recibe una carta que revive en su memoria una aventura casi olvidada. Vera Wormser, una mujer judía que fue su amante, le ha escrito como lo hizo quince años antes, pero en esta ocasión Leónidas decide no destruir la carta como sí lo hizo con la anterior.
Los recuerdos que despierta esa letra que vuelve a ver después de tanto tiempo, lo impulsan a mirarse con ojo crítico y a reflexionar sobre el sentido de su existencia, situación que lo lleva a contemplar la posibilidad de ejecutar acciones que tendrían consecuencias impredecibles para la estabilidad que ha conseguido con su matrimonio y como burócrata.
Werfel con una profunda perspicacia e ironía analiza la sociedad austriaca de los años previos a la anexión del país por parte de la Alemania nazi, reflejada en el débil carácter del personaje principal que se debate entre el deber y la conveniencia.

viernes, 5 de abril de 2019

Boquitas pintadas

«FALLECIMIENTO LAMENTADO. La desaparición del señor Juan Carlos Etchepare, acaecida el 18 de abril último, a la temprana edad de 29 años, tras soportar las alternativas de una larga enfermedad, ha producido en esta población, de la que el extinto era querido hijo, general sentimiento de apesadumbrada sorpresa, no obstante conocer muchos allegados la seria afección que padecía.»


*************************
En 1969 Manuel Puig publicó la novela “Boquitas pintadas” donde narra la vida de unas mujeres que ha sido marcada directa o indirectamente por Juan Carlos, un muchacho seductor que muere a los 29 años dejándoles en la memoria una imagen eternamente joven mientras que para ellas el tiempo sigue su curso sin llegar a satisfacer sus expectativas.
Para contarnos la historia de Nené, Mabel o Celina el autor se vale de expresiones de la cultura popular (en el cine, la radio, la música, la moda, las revistas), pero sobre todo de la correspondencia que mantienen los protagonistas, para armar una trama que se desarrolla durante décadas. Utiliza el género epistolar para definir el perfil social y psicológico de sus personajes. Convencionalismos y costumbres afloran en las cartas para dar cuenta de las ideas que determinan el patrón de vida de hombres y mujeres en la época en la que suceden los hechos (entre 1935 y 1968).
Es esta una novela de lo cotidiano donde cartas, álbumes de fotografías familiares, agendas o documentos oficiales son los elementos que combina Puig para levantar el plano de una vida en el que las relaciones entre la gente están determinadas por especulaciones, ideales y prejuicios; donde la exaltación de las emociones que expresan las canciones (tangos y boleros), la radio en las novelas o el cine y las revistas reducen la realidad a una copia insuficiente.

viernes, 29 de marzo de 2019

Ciudad de cristal

New York era un espacio inagotable, un laberinto de interminables pasos, y por muy lejos que fuera, por muy bien que llegase a conocer sus barrios y calles, siempre le dejaba la sensación de estar perdido. Perdido no sólo en la ciudad, sino también dentro de sí mismo. Cada vez que daba un paseo se sentía como si se dejara a sí mismo atrás…”
*************************
Paul Auster inicia “La trilogía de New York” con la publicación en 1985 de “Ciudad de cristal” donde cuenta el extraño caso de Daniel Quinn, un autor que bajo el seudónimo de William Wilson escribe novelas detectivescas.
“Todo empezó por un número equivocado”; así empieza la novela y así empieza Quinn a involucrarse en el mundo de Max Work, el protagonista de sus obras, al aceptar un trabajo de detective privado, afrontando una situación evidentemente dudosa al adoptar la identidad de otra persona (un hombre llamado Paul Auster) para seguir los pasos de Mr. Stillman quien está a punto de salir en libertad. Una tarea sencilla en apariencia que lleva a Quinn a entrar en contacto con seres que llevan una vida insólita determinada por el misterio y a reafirmarse en esa imagen que tiene de su ciudad como un laberinto que cambia cada día y donde podría dejar de ser él mismo.
En esta novela, a una clásica historia del género negro se superponen las ideas sobre la vida que va anotando Quinn en un cuaderno y las indagaciones que hace sobre los personajes cuyas identidades están curiosamente emparentadas con obras literarias como “William Wilson” de Edgar Allan Poe, “Don Quijote de la Mancha” de Miguel de Cervantes Saavedra o “A través del espejo” de Lewis Carroll.
El autor se vale de los recursos de la novela negra para hacer a la manera de Cervantes un juego literario donde para entender qué le sucedió a Daniel Quinn tal vez haya que recurrir a las pistas que aparecen en las reflexiones que sobre el mundo y la literatura hacen aquí los personajes-escritores.

viernes, 8 de marzo de 2019

Miramar

“El ascenso evoca el descenso, la fuerza rememora la debilidad, la inocencia alude a la corrupción y la esperanza, a la desilusión.”
*************************
En una pensión de la ciudad de Alejandría confluyen, representados por los personajes que allí viven, los aspectos más relevantes de la sociedad egipcia alrededor de 1965, fecha en la cual fue publicada la novela “Miramar” escrita por Naguib Mahfuz; una sociedad liderada por Abdel Násser el dirigente que desde 1954 intentaba arrancar a su país del adormecimiento de siglos en los que fue dominado por extranjeros.
Cuatro voces relatan los mismos sucesos que tuvieron como epicentro esa pensión (agregando, cada uno de ellos, datos desconocidos por los otros y relevantes para componer toda la historia): un anciano periodista retirado, antiguo luchador por la independencia de Egipto; un joven terrateniente que trata de aprovecharse de la nueva situación política y social; un joven e inseguro locutor de radio y un activista campesino que quiere medrar socialmente. Junto a ellos encontramos a dos personajes que se ubican en los extremos del espectro social: Marina la propietaria, una mujer venida a menos de origen griego que representa la nostalgia y la belleza que pudo tener el pasado y Sohra Salama una bella campesina fuerte y decidida que ha escapado de su aldea y del dominio de su familia; un hecho que para todos es reprobable pero que las nuevas condiciones sociales del país hacen posible.
Los días pasan, entre las intrigas cotidianas y las presiones para adaptarse al nuevo aire de los tiempos, en el lugar donde Marina y Sohra encarnan la realidad de una nación que recuerda un pasado al que los años han limado las aristas y que mira con esperanza hacia un brillante futuro que tal vez llegue a cumplirse.

viernes, 1 de marzo de 2019

El golem

“El que pregunta obtiene la respuesta que necesita: de lo contrario, ninguna criatura seguiría el camino de sus anhelos.”
*************************
Una profunda búsqueda caracteriza El golem, la novela del género fantástico que Gustav Meyrink publicó en 1915, donde el azaroso destino de Athanasius Pernath se entreteje con la presencia de un ser creado por un rabino que según una leyenda judía aparece cada treinta y tres años, causando estupor y espanto a quienes se lo encuentran.
El protagonista, que habita en el gueto de Praga, no recuerda casi nada de su pasado e inicia una indagación impulsado por la sensación de que su vida no tiene asidero en la realidad. Con ese propósito intenta estrechar sus lazos de amistad con el archivero del ayuntamiento judío, Schemajah Hillel, quien vive en su mismo edificio pero cobra más fuerza su interés en auxiliar a Angelina, una mujer en peligro que resulta ser una amiga de la infancia, y a Miriam, la vecina que cree que los milagros existen, terminando por internarse en un laberinto físico y emocional que paso a paso le permite reconstruir sus recuerdos cuya perdida es el producto aparente de las sesiones de hipnotismo a las que fue sometido para tratar su locura.
En esta historia de rencores, intrigas y muertes violentas, se entrelazan leyendas populares con el esoterismo y las teorías sobre el inconsciente. Colmada de simbologías que se apoyan en la Cábala, la alquimia, el tarot y antiguos ritos esta novela mezcla sueño y vigilia de manera indistinta llevando al lector a una zozobra constante y a sentir por sí mismo el horror que produce lo desconocido, uno de los elementos imprescindibles de la literatura fantástica.

sábado, 26 de enero de 2019

Desesperación


-"…la invención artística contiene infinitamente más verdad intrínseca que la vida real."
*************************
La confianza en la veracidad de lo que dice un autor, al menos en lo que se refiere a la historia que propone, es puesta a prueba en la novela Desesperación de Vladimir Nabokov, publicada por entregas en 1934. El protagonista que pretende crear una obra con su propia vida no duda en mentir abiertamente expresándolo con claridad para que el lector esté al tanto de sus intenciones.
Durante un despreocupado paseo por el campo Hermann Karlovich se encuentra a Félix un vagabundo que según su percepción se le parece extraordinariamente y con base en ese parecido decide incluirlo en una trama que resolverá todos sus problemas. Aunque a veces duda, sigue adelante con su propósito y prepara todo el entorno para cuando llegue el momento de poner en práctica la estrategia por la cual conseguirá lo que quiere. Toma las medidas pertinentes para que sus pasos no levanten sospechas: aleja de su casa a Ardalion, el supuesto primo de su esposa, y alecciona a ésta con respecto a su propósito dándole una explicación que como siempre es una elaborada mentira como las que ha contado durante toda su vida.
Después de llevar a cabo la acción principal de su plan huye pero más tarde, en otro país, se entera de unos hechos que darían al traste con sus planes y hasta podrían costarle la vida.
Nabokov mediante la voz de Hermann plantea la premisa principal para leer su novela: el arte puede llegar a ser más verdadero que la realidad misma. Cuando Hermann inventa historias como la que le cuenta a Lydia su esposa sobre un hermano inexistente o le habla a su amigo Orlovius de la finalidad de las cartas que ha recibido está creando otro mundo, más verdadero que la opresiva cotidianidad en la que vive.

viernes, 18 de enero de 2019

La ratonera

“…sobre el cadáver encontraron un papel que decía ‘Éste es el primero’; y debajo de estas palabras había tres ratoncitos dibujados y unas notas musicales. Las notas corresponden a la cancioncilla infantil titulada ‘Tres ratones ciegos’.”
*************************
Una de las piedras de toque del subgénero policial es sin lugar a dudas La ratonera (The Mousetrap), la obra de teatro escrita por Agatha Christie que no ha dejado de representarse ininterrumpidamente desde su estreno en el Theatre Royal de Nothingham en el otoño de 1952 y que después de su traslado a la ciudad de Londres se ha convertido en otro de los atractivos turísticos de esa ciudad.
En una casa de huéspedes que ha abierto sus puertas recientemente se cometerá un crimen, y se intentará llevar a cabo otro; situación que tiene sus raíces en hechos del pasado. Coinciden en aquel lugar ocho personajes que se ven envueltos en el desenlace de una vieja historia que involucra a unos niños. Como en toda obra de carácter policiaco todos resultarán sospechosos, y el espectador pasará de una certeza a otra hasta el final.
Gracias a la habilidad de Agatha Christie para pintar caracteres con unos cuantos trazos y a las claras indicaciones que da a los actores o las efectistas entradas y salidas de escena perfectamente definidas en el libreto, se mantiene la tensión sin que llegue a decaer la expectativa a pesar del tono de comedia ligera que se respira todo el tiempo.
El pasado, la venganza y el toque macabro de las canciones infantiles son elementos que aparecen con frecuencia en la obra de esta autora quien supo combinar como pocos escritores los elementos policiacos y de suspenso con un agudo sentido de la observación del comportamiento humano para producir una obra que en su conjunto es bastante sólida.

viernes, 11 de enero de 2019

Tatuaje



“…en los libros ilustrados la belleza era símbolo de fortaleza, y la fealdad, de flaqueza. Todos deseaban conseguir la perfección con tal vehemencia que llegaban al extremo de hacerse tatuar, y en su piel se perfilaban contornos majestuosos y sombras multicolores.”
*************************
Una de las costumbres distintivas de las clases populares en el Japón de finales del siglo XIX era la del tatuaje, considerado por muchos como un elemento que realzaba el atractivo de aquellos que deseaban alcanzar la perfección física. En Tatuaje, un cuento publicado en 1910, Junichiro Tanizaki narra la historia del talentoso Seikichi quien fuera degradado de pintor de ukiyo-e (el grabado japonés) a tatuador, aunque no pudo ser despojado de su sensibilidad y espíritu de artista. Quizá su degradación se debiera a sus apetitos poco convencionales; su placer se alimentaba de maneras extrañas en el que se mezclaban la sensualidad y el dolor. Lo que sí se conoce de seguro es que era el mejor entre los mejores y para ser tatuado por Seikichi era necesario tener una piel y un porte seductores. Pero su “verdadero deseo era encontrar una hermosa mujer de piel resplandeciente en la cual tatuar su propia alma”. Cuatro años le llevó esa búsqueda, hasta que entrevió un pie y así supo que su dueña era la mujer que había estado buscando, quien merecía que él vertiera su alma en ella. Tuvo que esperar casi dos años más hasta que el azar le fue favorable.
Una jovencita, ayudante de geishas, llegó a su taller y Seikichi adivinó que esa muchachita tímida e inexperta era la que había esperado y que sería una mujer consciente del poder que ejerce la belleza, como el que ejercieron en su época las favoritas de algunos emperadores chinos. Bastaba con que él hiciera uso de sus habilidades; su tatuaje la transformaría.

viernes, 21 de diciembre de 2018

El cuento de Navidad de Auggie Wren

“Mientras haya una persona que se la crea, no hay ninguna historia que no pueda ser verdad.”
*************************
Escribir un cuento de Navidad sin caer en el fácil sentimentalismo fue la tarea que se propuso Paul Auster tras aceptar el encargo que le hizo el New York Times en 1991.
Sin saber cómo tratar un tema que en principio no le gusta -los exaltados sentimientos que niños y adultos expresan con esta época-, Auster ve acercarse el tiempo de entrega sin tener qué decir. Por fortuna le habla de su preocupación a un conocido que trabaja en una cigarrería, un hombre con el que ha hecho buenas migas después de que este se enterara de su profesión y de enseñarle a su vez una colección de más de cuatro mil fotos tomadas por él mismo. Este hombre resolverá su dificultad al contarle una historia relacionada con el día de la Navidad, donde intervienen un ladronzuelo, una mujer casi nonagenaria y el mismo narrador, Auggie Wren (un nombre supuesto).
Paul Auster, en El cuento de Navidad de Auggie Wren, se las ingenia para contar (en pocas páginas) una historia que se puede leer desde varias perspectivas. Sin eludir esos sentimientos que tanto le disgustaban al comienzo entrelaza varios relatos que tienen como eje central la tarea que se le había asignado. Combina el Espíritu de la Navidad (un concepto trabajado por autores ya clásicos como Dickens y O. Henry) con otros asuntos como la pertinencia del engaño o el paso del tiempo atestiguado por la fotografía.

viernes, 14 de diciembre de 2018

Los que aman, odian

“…nuestra adhesión a la vida se mide por la intensidad de nuestras pasiones.”
*************************
En la novela policiaca Los que aman, odian, publicada por los autores argentinos Silvina Ocampo y Adolfo Bioy Casares en 1946, la literatura es uno de los elementos a tener en cuenta en la investigación de un crimen pues entre las pistas principales aparecen referencias a libros y a fragmentos de obras literarias, aunque es posible que sean tan equívocas como las relacionadas con las motivaciones del asesino.
El escritor Humberto Huberman, médico homeópata, busca una total tranquilidad para escribir un guion cinematográfico basado en una obra clásica (El satiricón de Petronio) y encuentra el que cree es el lugar ideal para hacerlo: un hotel a la orilla del mar. Pero el sosiego que necesita se ve alterado desde el momento en que debe anunciar la causa de la muerte inesperada de uno de los huéspedes. Como consecuencia de esta afirmación se sigue la ineludible pesquisa policial dificultada por una tormenta de arena que mantiene aislado el balneario y a sus ocupantes, entre los que se encuentra el culpable. Las intensas pasiones de los personajes interfieren en la indagación de la policía y determinan los argumentos y las explicaciones que plantean el comisario Aubry, el doctor Huberman y Manning otro de los huéspedes.
Utilizando todas las estrategias del género los autores exponen con habilidad las emociones de los sospechosos para guiar al lector y conducirlo hasta un final que como siempre, es sorpresivo.

sábado, 24 de noviembre de 2018

Lluvia


La persistencia y el fragor del agua en el tejado de hierro llegaban a crear en cualquiera un deseo de gritar, de huir, de taparse ojos y oídos para no contemplar más aquella cortina gris, monótona, asfixiante.”
*************************
En Pago-Pago, una isla del océano Pacífico, y a consecuencia de una epidemia, unos viajeros deberán esperar durante al menos dos semanas bajo unas lluvias torrenciales para continuar su ruta. En el alojamiento que encuentran se desarrollará el drama en torno al cual gira esta historia.
Frente a la perspectiva de quince días atascados en la isla los viajeros intentan continuar con sus costumbres lo que ocasiona un duro enfrentamiento entre el misionero Alfred Davison y Sadie Thompson, una mujer alegre y extrovertida.
El misionero, quien está convencido de realizar una ineludible labor de redención, presiona a la señorita Thompson, a quien considera un alma perdida, para que altere drásticamente su comportamiento y además regrese a los Estados Unidos. Ella apela su decisión pero nada conmueve a Davison que está decidido a “salvarla”. Su esposa y un matrimonio que se aloja en el mismo lugar asisten al cambio paulatino de la mujer y a los efectos debilitadores que los esfuerzos del misionero ejercen sobre su propio ánimo.
El forcejeo de voluntades parece inclinar la balanza hacia la férrea posición del misionero Davison; sin embargo hasta el último momento el lector no podrá comprender los matices de un desenlace que aunque inesperado no lo sorprende.
William Somerset Maugham en Lluvia, publicada en 1921, no necesita más que de unas cuantas páginas para desarrollar un tema tan viejo como la humanidad.

viernes, 16 de noviembre de 2018

La conjura de los necios

“Yo, personalmente, protestaría con todas mis fuerzas si sospechase que alguien intentaba auparme a la clase media. Lucharía contra el individuo descarriado que intentase auparme, desde luego. La lucha tomaría la forma de manifestaciones de protesta con los carteles y pancartas tradicionales, que, en este caso, dirían: «Muera la clase media», «Abajo la clase media». No me importaría tampoco lanzar uno o dos cócteles molotov. Además, evitaría meticulosamente sentarme junto a miembros de la clase media en restaurantes y en transportes públicos, manteniendo incólumes la honradez y la grandeza intrínsecas de mi ser.”
*************************
Con la publicación póstuma de La conjura de los necios en 1980 aparece uno de los personajes literarios más polémicos del siglo XX: Ignatius J. Reilly, un hombre que cuestiona con dureza la realidad que lo rodea y que está comprometido en una cruzada personal (contra casi todo), respaldada en un pensamiento político y filosófico inspirado en autores latinos y medievales que plasma sin un método específico en los rimeros de cuadernos Gran Jefe desperdigados por su habitación o en la furibunda correspondencia que mantiene con Myrna Minkoff, una anarquista de ideas opuestas a las suyas.
A consecuencia de un pequeño accidente automovilístico Ignatius deberá abandonar el mundo seguro donde vive con su madre y entrar a formar parte de un mercado laboral que critica. Pero este giró de la fortuna, como lo llama él aplicando las teorías de Boecio su autor de cabecera, es visto por el protagonista como la oportunidad de poner en práctica sus ideas: organizar un partido político, promover reivindicaciones sociales en una fábrica y hasta planear el “rescate” de una mujer de las garras de la pornografía; proyectos que chocan de una u otra manera con los intereses de los involucrados que siempre están en desacuerdo con los suyos o que en todo caso no logran comprender el alcance de sus propuestas.
La ciudad de New Orleans de los años 50 y en especial el barrio francés conforman el universo donde se desarrollan las aparentemente absurdas andanzas de Ignatius y donde cada uno de los demás personajes juega un papel fundamental en el gran panorama social que pinta John Kennedy Toole en esta novela, a la que no sin razón se le otorgó el premio Pulitzer en 1981.

lunes, 12 de noviembre de 2018

Tierras de cristal

“…lo que hay de bello en la vida es siempre un secreto (…) las cosas que se saben son las cosas normales, o las cosas desagradables, pero después están los secretos, y es allí donde va a esconderse la felicidad…”
*************************
En “Tierras de cristal” la novela de Alessandro Baricco publicada en 1991 todos los caminos conducen a Quinnipak, una ciudad inexistente, donde todos sus habitantes son excepcionales.
En el industrial Dann Rail que “soñaba con trenes y sabía dónde estaba el infinito”; productor de cristal de lujo y viajero incansable, se resume el espíritu de una época trastornada por los cambios que trajeron consigo los ferrocarriles, cuestionando la concepción que se tenía del tiempo y el espacio. Su esposa Jun espera a que después de cada partida del señor Rail llegue una caja, siempre distinta, cuyo contenido le anuncie su regreso, pero también espera el momento de su propia partida para completar una misión que posterga continuamente.
Además de ellos que son el eje de la vida social en la ciudad están entre otros: Pekisch el músico-inventor que cada semana ensaya la música que interpreta el humanófono, instrumento complejo que quizá sólo la gente de este lugar sea capaz de entender y disfrutar; la viuda Abbeg que compone su vida con arreglo a un pasado matrimonial inexistente; O Pehnt, el chico que apunta diariamente en su cuadernillo ideas y conocimientos necesarios para la vida. Sin olvidar por supuesto al arquitecto Hector Horeau cuya aparentemente absurda idea de un palacio de cristal se materializará gracias a otras manos.
Esta novela toma el pulso a un momento de la humanidad donde los adelantos de la revolución industrial determinaron cambios drásticos en todos los órdenes de la vida. Es una obra cuyos personajes, a pesar de su complejidad, no son la columna vertebral de la novela; ésta la componen las reflexiones y descripciones del autor que, con una prosa compleja y barroca por momentos, arman una trama donde se entremezclan indistintamente las peculiares historias de sus protagonistas.

viernes, 2 de noviembre de 2018

La huella de un beso

“Cuando se está enamorado, no se le cuentan al otro historias graciosas, sino historias que les ofrezcan a ambos la oportunidad de vivir el enamoramiento sin tener que estar callados.”
*************************
Daniel Glattauer publicó en el año 2000 la novela “La huella de un beso” donde cuenta la historia de Max y Katrin. Max es un hombre de 34 años que arrastra un terrible trauma desde la infancia, mientras que Katrin es una mujer de casi treinta cuya vida amorosa es prácticamente inexistente.
La novela que se desarrolla en diciembre, inicia con los planes de Max de hacer un viaje de vacaciones a un lugar cálido. Para poder hacerlo tendrá que encontrarle un hogar temporal a Kurt su perro, un braco alemán de pelo duro, cuyo único interés en la vida es dormir debajo de un sillón. Max pone un aviso en el periódico y será Katrin la persona aparentemente más idónea para cuidar de Kurt durante ese tiempo.
La relación entre Katrin y Max que en un comienzo es estrictamente comercial poco a poco se vuelve más íntima. El problema está en el trauma que arrastra Max y que no se atreve a mencionar pues las veces que lo ha hecho las consecuencias han sido catastróficas. Katrin que no sabe nada y que a su vez arrastra con otro trauma, la presión obsesiva de sus padres para que se case, malinterpreta el comportamiento errático de Max.
Kurt por otro lado tomará  parte activa (paradójicamente) en los derroteros que tome la relación entre estos dos adultos que se dejarán llevar por la atracción mutua, aunque ya estén acostumbrados a los fracasos sentimentales.
Esta novela de corte humorístico se interna por los desencuentros que se dan en las relaciones que establecen las personas y pone el énfasis en esas circunstancias que marcan la vida de los demás y que si se conocieran permitirían entenderlos más fácilmente.

viernes, 19 de octubre de 2018

Una dama en apuros

En términos psicológicos, podría decirse que el señor Glodstone tenía un problema crónico de identidad que resolvía mediante la sustitución literaria.”
*************************
Una enrevesada y disparatada historia es el centro de Una dama en apuros la novela de Tom Sharpe publicada en 1982, cuyos protagonistas principales, un profesor y un estudiante de un mediocre colegio inglés, se embarcan en lo que consideran será una aventura similar a aquellas en las que se involucran los héroes de sus libros preferidos.
Regis Glodstone, un profesor con una estrecha idea del mundo entresacada de las novelas de espías y aventureros que lee se lanza a rescatar a una condesa (la madre de uno de sus alumnos) que le ha escrito pidiendo ayuda. Lo que no sabe es que las cartas son falsas producto de la imaginación desquiciada de un enemigo suyo. De camino hacia el rescate se lleva consigo a Peregrine Clyde-Browne uno de sus estudiantes cuya capacidad de deducción es prácticamente nula: todo lo entiende al pie de la letra.
La historia que avanza dando giros inesperados, se complica a cada paso por la incompetencia de Glodstone; por las medidas que toma el verdadero redactor de las cartas que se ha arrepentido de haberlas escrito, pero sobre todo por los extremos a los que llegan las acciones de Peregrine, con consecuencias tan catastróficas que alcanzan a poner en peligro las relaciones y alianzas internacionales de Inglaterra.
Tom Sharpe combina con maestría en Una dama en apuros el funcionamiento de la diplomacia mundial y del sistema educativo inglés para contar una hilarante historia sin recurrir al humorismo hueco de los lugares comunes.